Aunque la movilización social es cada vez más urgente frente a la dictadura del capital y de la banca anivel global, es muy triste que en nuestro país tengamos que esperar a iniciativas extranjeras para "Tomar la calle". Así entiende uno ver en estas movilizaciones expresiones de mimetismo lamentables.
El domingo 15 de mayo las capitales isleñas fueron testigos de movilizaciones importantes bajo el paragua de la convocatoria estatal de “Toma la calle” contra la crisis capitalista y la impunidad de la banca. Miles de ciudadanos canarios salieron a las calles en Gran Canaria, Tenerife, La Palma y Lanzarote bajo el lema “Democracia real ya”. Una característica de la movilización era el rechazo a la participación de los partidos políticos y sindicatos. Una idea que de entrada consideramos positiva y más en tiempos preelectorales. La convocatoria fue un éxito a pesar de todo pero también es justo entender que muchos sectores del nacionalismo canario veamos con recelo estas justas movilizaciones. Es muy triste que padeciendo Canarias los mayores índices de miseria en el Estado Español y en La Unión Europea tengamos que esperar a una iniciativa estatal para sumarnos a ella. ¿Cómo es posible que los canarios no nos movilicemos hasta que el sucursalismo sea activado desde la metrópoli? ¿No basta padecer una situación social mucho más dramática que la media española y no digamos europea?. En este país contamos con muchísimos más motivos para salir a la calle desde hace ya mucho tiempo, incluso desde antes de que empezara la crisis capitalista. Un país que constituye una colonia bananera donde la corrupción es la ley, donde la destrucción del territorio a cambio de migajas y la colonización en todos los aspectos es una realidad tangible. Eso es Canarias aunque nos duela, y los canarios aún esperamos a que desde la capital de un país al que le importamos un comino nos dé luz verde para que tomemos la calle. Nosotros los canarios que sabemos lo que somos, incluso los que no, hace muchos años que estamos indignados e indignadas. Por suerte aún existen organizaciones sindicales y políticas canarias y de clase, que aunque minoritarias, mantienen como pueden el candil de la dignidad nacional y social de este pueblo.
Algunos ejemplos de "papagayismo":
El domingo 15 de mayo las capitales isleñas fueron testigos de movilizaciones importantes bajo el paragua de la convocatoria estatal de “Toma la calle” contra la crisis capitalista y la impunidad de la banca. Miles de ciudadanos canarios salieron a las calles en Gran Canaria, Tenerife, La Palma y Lanzarote bajo el lema “Democracia real ya”. Una característica de la movilización era el rechazo a la participación de los partidos políticos y sindicatos. Una idea que de entrada consideramos positiva y más en tiempos preelectorales. La convocatoria fue un éxito a pesar de todo pero también es justo entender que muchos sectores del nacionalismo canario veamos con recelo estas justas movilizaciones. Es muy triste que padeciendo Canarias los mayores índices de miseria en el Estado Español y en La Unión Europea tengamos que esperar a una iniciativa estatal para sumarnos a ella. ¿Cómo es posible que los canarios no nos movilicemos hasta que el sucursalismo sea activado desde la metrópoli? ¿No basta padecer una situación social mucho más dramática que la media española y no digamos europea?. En este país contamos con muchísimos más motivos para salir a la calle desde hace ya mucho tiempo, incluso desde antes de que empezara la crisis capitalista. Un país que constituye una colonia bananera donde la corrupción es la ley, donde la destrucción del territorio a cambio de migajas y la colonización en todos los aspectos es una realidad tangible. Eso es Canarias aunque nos duela, y los canarios aún esperamos a que desde la capital de un país al que le importamos un comino nos dé luz verde para que tomemos la calle. Nosotros los canarios que sabemos lo que somos, incluso los que no, hace muchos años que estamos indignados e indignadas. Por suerte aún existen organizaciones sindicales y políticas canarias y de clase, que aunque minoritarias, mantienen como pueden el candil de la dignidad nacional y social de este pueblo.
Algunos ejemplos de "papagayismo":
[No es Zamora, es Santa Cruz de Tenerife]
[No es Valladolid, es Las Palmas de Gran Canaria]
[No es Cuenca, es Las Palmas de Gran Canaria]