23/4/09

ENTREVISTA. Francisco Javier González

"Aunque los derechos de libre determinación nos asiste, la experiencia nos dicta que los derechos de la ONU y sus resoluciones no se otorgan graciosamente, se conquistan"




Nacido en Aguere en 1940. Químico (Universidades de La Laguna y Complutense) ha sido profesor y director de varios Institutos de Bachillerato. Colabora desde joven en la lucha política por la independencia de Canarias desde un pensamiento marxista renovador. Militante del clandestino Partido de los Trabajadores Canarios (PTC), participa en el desarrollo de Solidaridad Canaria y de la Confederación Canaria de Trabajadores y en su periódico “Nación Canaria”. Con la disgregación del PTC es nombrado Secretario General del Partido Revolucionario Africano de Canarias (PRAIC) y, al integrarse con la Organización para los Comunistas Canarios (OCC) y otros colectivos para fundar el Frente Popular por la Independencia de Canarias (FREPIC-AWAÑAK) en 1986, es elegido Secretario General del mismo hasta que, por divergencias en la línea política y la trayectoria de la organización, causa baja en la misma tras el V Congreso. Fundador y Presidente del Centro Canario de Estudios Amistad y Solidaridad entre los Pueblos de África “Amílcar Cabral", impulsa desde él las primeras celebraciones de “La Rebelión de los Gomeros” y la creación del Congreso Mundial Amazigh (París 1996) y luego del 1er Congreso (Tafira 1997). Fundador y director de la revista teórica “La Sorriba” y de la Editorial Tagoror, colaborador hace años de prensa canaria (El Día, La Provincia y La Voz) y asiduo actualmente en prensa digital (Magec, Canarias Semanal, El Independiente de Canarias, El Guanche, Canarias Insurrecta, Kaos en la Red, Aporrea…) y de Radios Libres (Guiniguada, Onda Isleña, Popular de Canarias…)



1.- ¿Qué es Canarias para usted?

Parto de que no existe nada fijo, inmutable. Todo, incluso la propia naturaleza, está sujeto a permanente cambio. Pensar lo contrario es, simplemente, un "pensamiento religioso". También las naciones, que son el producto de toda una serie de relaciones sociales en evolución. Son entes histórico-socio-culturales contingentes y, por lo mismo, susceptibles de verificación. La nuestra, en el S. XV era una sociedad de base étnica amazigh, compartimentalizada en siete conjuntos insulares que, a su vez, se subdividían internamente en cantones (Menceyatos y Guanartematos en las de Tenerife y Gran Canaria). Es la invasión, conquista y subsiguiente colonización española la que confiere a Canarias su unidad y actúa de partera de la Nación Canaria. Nuestra patria, por lo tanto, nace ya como nación colonial, con la división entre colonizadores y colonizados - a los que pronto se unen esclavos importados del continente y las clases más bajas de los mismos europeos invasores- división, pues, en gobernantes y gobernados o, resumiendo, en explotadores y explotados. Cierto es que la relación colonizador/colonizado ha ido variando a medida que evolucionan las fuerzas productivas de la sociedad, pero subsiste el hecho incuestionable de que una metrópoli –España- situada en otro continente y respondiendo a sus propios intereses, ha condicionado y sigue condicionando el desarrollo de esas fuerzas productivas, negándonos el derecho a los canarios de organizarlas según nuestro propio interés. Eso es, fundamentalmente, lo que define sin paliativos a Canarias hoy: Una colonia española en el noroeste de África.
2.- ¿Qué cree que define a los canarios?

También la naturaleza humana y, por lo tanto, la idiosincrasia de los pueblos –y los canarios constituimos un pueblo diferenciado- es producto de las relaciones sociales que, como planteaba al definir Canarias como una colonia española, están determinadas de alguna forma por el estado de las fuerzas productivas que, a su vez, conforman al modo de producción en que se insertan las relaciones sociales. Es, por lo tanto, nuestra situación colonial la que nos condiciona y, a la vez, nos define como pueblo y no podemos, de ninguna forma, ignorar esta base material de la idiosincrasia del canario. El dominio colonial, con su carácter total y simplificador, niega siempre la existencia como pueblo del colonizado. No le basta con destruir el entramado social precolonial e introducir sus propias normas jurídicas y sus valores sociales, lo que, al siglo escaso de finalizada en Tenerife la etapa de la conquista militar y aunque subsistían las resistencias (los “alzados”), ya habían conseguido en gran manera los españoles, sino que toda su actuación se orienta a llevar al colonizado, al canario, a negar incluso su existencia como pueblo y a admitir, con ello, la irrealidad de su nación. Hoy, con cinco siglos de permanente opresión cultural y social, de castración de nuestra capacidad creativa y de premeditado ninguneo, se han generado patrones de comportamiento que el foráneo identifica como sometimiento, aplatanamiento, abulia, restructuración.…y que son, en realidad, respuestas y estrategias de supervivencia de un pueblo colonizado, como se pone de manifiesto cuando, el canario, lejos de su propia patria, se muestra de forma totalmente opuesta a ese cliché impuesto y es capaz de enfrentarse con éxito al propio colonizador como se vio en las epopeyas de las independencias americanas.Ahora que entre Obama y Chávez han puesto de moda a Eduardo Galeano –para algo sirven las Cumbres e la OEA- tenemos que aplicarnos la frase de la Proclama insurreccional de la Junta Tuitiva de la ciudad de La Paz (julio 1809) con que encabeza “Las venas abiertas de América Latina”: “Hemos guardado un silencio bastante parecido a la estupidez”.
3.- ¿Tiene el pueblo canario derecho a decidir su futuro y en qué modelo?

Son preguntas que, aunque interconectadas, son diferentes. El derecho a decidir su futuro un pueblo colonizado es inalienable e imprescriptible. En realidad es la base de todos los Derechos democráticos puesto que, sin él, tanto el conjunto de normas jurídicas, como el modelo político que comportan, nos viene impuesto de forma exógena por la metrópoli. En la Carta de la ONU (Art 1.2) se establece que las relaciones entre naciones deben estar “basadas en el respeto al principio de la igualdad de derechos y al de la libre determinación de los pueblos”. Esto confiere al Derecho de Autodeterminación la cualidad de “Principio”, esto es, de una norma abstracta inspiradora de conductas pero carente de la suficiente fuerza normativa. De todas formas, el hecho de estar en el articulado y no en el preámbulo lo hace, hasta cierto punto, parte de derecho positivo como a cualquier otra de las disposiciones del Tratado. Además, a posteriori, son varios los instrumentos jurídicos internacionales que confieren al Principio de Autodeterminación carácter de norma de derecho y no solo de mero principio. Por ejemplo, el Art. 1 del “Pacto Internacional de derechos Civiles y Políticos”, promulgado por Resolución 2200 de la ONU el 16/12/1966 y ratificado por el Estado Español ¡once años más tarde huyendo de la descolonización! (27/4/1977) establece, en su Aptdo. 1, que “Todos los pueblos tienen el derecho a la libre determinación. En virtud de ese derecho establecen libremente su condición política y proveen asimismo a su desarrollo económico, social y cultural”. Para que no quede duda, en su Aptdo. 3 establece que: “Los Estados partes en el presente pacto, incluso los que tienen la responsabilidad de administrar territorios no autónomos y territorios en fideicomiso, promoverán el ejercicio del derecho de libre determinación y respetarán este derecho de conformidad con las disposiciones de la Carta de las Naciones Unidas” de plena vigencia en el derecho español desde su publicación en el BOE nº 103 del 30/4/1977 y absolutamente ignorado desde entonces para Canarias por la potencia administradora. Estos mismos artículos se repiten textualmente en el “Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales” de la misma resolución y fechas, y luego en innúmeras veces, como las muy conocidas Resoluciones 1514(XV), 2588(XXIV) 2621(XV), o la 2649(XXV) de 1970 que, en su punto 1, es tajante al decir: “La Asamblea General: Afirma la legitimidad de la lucha de los pueblos bajo dominación colonial y extranjera a los cuales se le ha reconocido el derecho a la libre determinación para recuperar ese derecho por todos los medios a su alcance”.Ahora bien, aunque es cierto que el derecho a la libre determinación nos asiste a los canarios como pueblo colonizado, no es menos cierto que la experiencia nos dicta que los derechos de la Carta de la ONU y la efectividad de sus Resoluciones no se otorgan graciosamente. Se conquistan. Tendremos la fuerza del derecho, pero hemos de conseguir y aplicar la fuerza suficiente y necesaria para que su aplicación sea efectiva, como han logrado otros muchos pueblos, y para ello necesitamos la construcción de una nueva hegemonía nacional-popular que sustituya a la actual que refleja y defiende los intereses de la metrópoli y de las oligarquías criollas que ayudan a su consolidación y mantenimiento. El modelo futuro de Canarias tiene que ser decidido por la nueva formación hegemónica que logre la independencia. Cuestiones nodales evidentes de ese futuro son la República Federal y la total erradicación del sistema de opresión social y cultural que ha generado la específica modalidad del capitalismo que constituye el dominio colonial español y el predominio de los sectores de las burguesías insulares aliadas con él.
4.- ¿Qué le falta a Canarias?

En mi criterio, el mayor obstáculo al necesario desarrollo armónico y autocentrado de Canarias, estriba en el conjunto de estructuras distorsionadas por su sometimiento a la hegemonía nucleada en torno al poder colonial y sus aliados criollos. Romper esa hegemonía precisa de la construcción de una contrahegemonía, de un nuevo bloque histórico. Debemos tener en cuenta que ese sistema de poder colonial, hoy hegemónico, más allá de los aparatos judicial, policial y militar que lo garantizan, se sostiene mediante una red ramificada de instituciones culturales, de las escuelas, universidades, asociaciones, medios de comunicación, partidos políticos e, incluso, la propia iglesia, que transmiten la ideología creada por los intelectuales orgánicos al servicio, consciente o inconsciente, del sistema. En consecuencia, Canarias necesita irse dotando de esos mismos medios y estructuras, pero al servicio de una nueva voluntad popular de liberación. Por lo mismo tenemos que desarrollar una cierta intelectualidad que cohesione y unifique todo el fermento revolucionario y el consenso generalizado de las masas populares para construir esa nueva hegemonía liberadora.
5.- ¿Qué hace usted por Canarias?

A lo largo de muchos años de lucha he intentado llevar a la práctica lo que acabo de expresar en la pregunta anterior y ahí están mis aportaciones en la militancia política, cultural, sindical y social. Hoy, y siempre por supuesto en la medida de mis fuerzas y capacidad, intento aportar algo a la estructuración de un pensamiento político que ayude a construir la voluntad colectiva de romper la dependencia y la concepción del mundo que esta ha generado en nosotros como pueblo y como individuos.
6.- ¿Cómo definiría la relación Canarias-Estado?

Más o menos creo haberla definido. Es una relación colonial evolucionada dentro del sistema capitalista, con la aquiescencia de la lumpenburguesía local y la sumisión y el consenso acrítico de las masas populares. No quedaría completo el cuadro sin considerar que, a su vez, la metrópoli española tiene idéntico papel dependiente de los centros de poder del capitalismo imperialista a nivel mundial. De ahí se desprende que nuestra liberación no termina cuando la bandera tricolor heptaestrellada sea izada en la sede de la ONU. En ese momento solo estaremos en el comienzo de una nueva etapa en la lucha por la ruptura de la opresión pero, espero, en ese momento estaremos dotados de una ética y una moral, nuevas y más elevadas que las que tiene como propias un espíritu colonizado y sumiso.
7.- ¿Cuáles son los problemas que en el futuro tiene que abordar Canarias?

Los mismos que en el presente. Repito que el izado de nuestra bandera como país “soberano” no garantiza en modo alguno el fin de la explotación especulativa del territorio, ni la sobreexplotación de nuestra fuerza de trabajo, ni el control popular de las fuerzas productivas, o el restablecimiento de nuestra soberanía alimentaria. De ahí la necesidad imperiosa de construir ese nuevo bloque histórico, más allá de una simple alianza de clases, que lleve a cabo una total transfiguración en la dirección política, social, cultural, intelectual y moral de nuestro pueblo, con una nueva conciencia de las metas a alcanzar para transformar la sociedad –y no solo la canaria- y avanzar en la consecución de una democracia radical y plural, ampliada a todos los nuevos espacios que las luchas emancipatorias van creando, como feminismo, minorías, ecología, homosexualidad, antiglobalización…..
8.- ¿Cuál sería la estrategia política para el futuro?

Creo que, en mi opinión, viene ya determinada en lo que he expuesto. Urge la construcción de ese nuevo bloque hegemónico nacional-popular y de esa voluntad colectiva que lo cohesione y vertebre. Están abiertos todos los campos de lucha. En el político es necesaria la vertebración de partidos políticos con ese horizonte claro de la transformación social y la desarticulación del dominio colonial. Al tiempo hay que fortalecer el sindicalismo de clase y revolucionario, sociopolítico, como fue en su día el modelo desarrollado en la CCT. En lo cultural y social es imprescindible la creación de nuevos espacios transversales y el fortalecimiento de los existentes, como asociaciones ciudadanas y culturales y, fundamental, dotarnos de los necesarios medios de difusión (prensa escrita y digital, radios, foros de debate, editoriales, música, webs, blogs, Facebook….). En fin, la articulación de esa nueva fuerza nacional-popular que construya el contramodelo que oponer al complejo entramado del tándem colonizador/burguesía de servicio. Si tenemos claro el horizonte, cada uno tendremos que aportar nuestra lucha para alcanzarlo.
9.- ¿Cómo definiría el proceso de la Autonomía Canaria?

“Autonomía” significa, etimológicamente, “Propia Ley” y, en Canarias, estamos muy lejos de ser “autónomos”, con un Parlamento delegado bajo el control de la normativa exógena y la inestimable connivencia de las fuerzas políticas que en él se representan. De hecho esta supuesta “autonomía”, además de una trampa filológica para enmascarar nuestra cualidad de “Territorio no autónomo”, no deja de ser una concesión –graciosa y graciable- del poder colonial y de su marco superior –la UE- a la burguesía insular, concesiones que históricamente ha realizado la metrópoli cuando, por sus intereses, amputa parte de las prebendas de esa burguesía, o cuando sospecha o supone que intentan dar el salto al control total y no delegado de los recursos que supondría la independencia. Así sucedió en tiempos recientes con los Puertos Francos, con la división provincial, con la Ley de Cabildos, con el REA y la RIC y con este Estatuto que regula nuestra dependencia y del que el Presidente de este Gobierno “autonómico” –que no autónomo- acaba de anunciar su pretensión de extenderlo a la consideración de “ultraperiférico” dentro, por supuesto, de su sacrosanta Constitución Monárquica Española. De todas formas, es obligación de las formaciones políticas o sociales que plantean la necesidad de la independencia para el progreso de esta tierra nuestra, el aprovechar cualquier mínimo resquicio que esta pseudoautonomía nos permita para avanzar.
10.- ¿Ha habido algún tipo de política nacionalista en Canarias?


Cada vez que alguien ha planteado públicamente que Canarias es una Nación como cualquier otra y que, por lo mismo, tiene la capacidad y la necesidad histórica de constituirse en estado soberano, esto es, cuando plantea abiertamente la independencia, está haciendo “política nacionalista”. En el pasado se plantearon intentos de independencia por las burguesía insulares, como en el inicio del XIX cuando la Junta Suprema de Canarias, radicada en Aguere, envió un barco a Londres para negociar la segregación de España, frustrada por la pusilanimidad del Marqués de Nava y la oposición de la Junta de Gran Canaria, partidaria del sátrapa Fernando VII pero, en la práctica, hay que esperar al nacimiento y auge de los movimientos obreros para que se plantee una política independentista fuera de la órbita y los intereses de las burguesías, mérito que hay que atribuir a Secundino Delgado y a sus colaboradores de “El Guanche” en sus dos épocas (Caracas y La Habana) primero, del “Vacaguaré” luego y del Partido Popular y la Asociación Obrera ya en Canarias. La continuidad la encontramos, en suelo cubano, en el PNC de 1924 –donde Gómez Wangüemert adoptó para el PNC la bandera azul del Ateneo lagunero de 1907- y, más tarde, ya en plena II República Española, con la ruptura de la corrupta monarquía borbónica y los nuevos horizontes de libertad, aparecen intelectuales como el gomero Guillermo Ascanio desde las páginas de “Espartaco” y otros que dan a luz el “Pacto del FUR”, que plantean abiertamente la posible segregación democrática de Canarias del Estado español. El nacimiento del movimiento “Canarias Libre” en 1959, bajo la influencia, entre otras, de la Revolución Cubana y del asesinato por el fascismo español de Juan García Suárez, “El Corredera”, es continuidad del nacionalismo de inspiración marxista. Posteriormente, en 1964 , la creación del MPAIAC, su reconocimiento por la OUA en 1968 y, sobre todo, la difusión del mismo con la emisiones de “La Voz de Canarias Libre” en 1975, hacen dar un salto cuantitativo considerable al independentismo. A partir de ese año se desarrolla un intenso movimiento en todo el Archipiélago con protagonistas como el MPAIAC, el PTC y el PRAIC; Solidaridad Canaria y el Centro Amílcar Cabral; la CCT y el SOC; el potpurrí de la UPC, el FREPIC-AWAÑAK, “Siete Estrellas Verdes”, el CNC……y hasta hoy. Queda, a mi juicio, que dejar sentado que, si en algún momento de nuestra historia, estuvimos en el camino de construir ese nuevo bloque nacional-popular necesario para alcanzar la independencia fue entre esos años del 77 al 80 que pueden denominarse como la “Primavera Guanche”. Los errores cometidos, que frustraron ese importante momento histórico, deben ser analizados para no repetirlos, ejerciendo una terapéutica función crítica y autocrítica de los que participamos, para impedir que, de nuevo, puedan lastrar al renaciente impulso en pro de la libertad y la soberanía que parece apuntar al sumarse a la lucha emancipatoria nuevas generaciones.


Extraído de:

20/4/09

OPINIÓN. La amortiguación burocrática de la lucha de clases

Compartimos este extracto de un texto de Octavio Hernández que quizás sea de interés para nuestros lectores. El texto invita a reflexionar sobre la historia reciente de los movimientos sociales en el País en general, y el movimiento indepenentista en particular, todo ello desde un punto de vista poco habitual.


http://www.canarias-semanal.com/EXTERNAS/E2117/E21170.HTML

Todo conduce a lo mismo: el capital financiero español y transnacional, con el apoyo del aparato estatal, habían evitado en Canarias un desarrollo industrial más allá del 11 por ciento del PIB, en alianza con la burguesía terrateniente y comercial, forzando que hasta el 80 por ciento del consumo fuera de importación, y así impidieron que se expandiera un proletariado industrial potencialmente desestabilizador, cuyos cuadros normalmente lideraban las movilizaciones anticapitalistas allí donde se levantaba una industria. En Canarias se dio un proceso amortiguador semejante al de la Política Agraria Común de la Unión Europea, cuyo origen se debe a la necesidad capitalista de sostener artificialmente a la pequeña propiedad agraria, por temor a la lucha de clases que tendrían que enfrentar algunos estados europeos si el libre mercado la abocaba a la proletarización.

La actividad del MPAIAC y, en general, la cultura marxista en la que se desenvolvieron tanto parte del independentismo "interior", como el movimiento comunista estudiantil, sindical y de partido, en los años setenta y hasta bien entrados los ochenta, convencieron a las clases y agentes del colonialismo y el imperialismo de que lo más conveniente para sus intereses en Canarias era, por una parte, llevar al paroxismo la terciarización económica, el sector servicios y el comercio ligados al turismo, que alcanzó hasta el 75 % del PIB -solo el turismo supone el 30 por ciento-, y por otra, utilizar el empleo público para mejorar las condiciones de vida del trabajo asalariado, garantizando una relación de dependencia directa laboral o profesional de la clase media administrativa isleña respecto al entramado institucional, político, electoral y partidario de la clase dominante, alejándola de la militancia intransigente y violenta, gracias a la idiotizante y pusilánime cultura de obediencia y subyugación caciquil heredada en democracia de la opresiva y destructiva, para la clase trabajadora conciente, etapa que comenzó en 1936. Eso que Víctor Ramírez ha llamado, con acierto, "ignorantación".

"A mi se me mata, pero no se me enyuga", había escrito el majorero Matías López Morales antes de ser fusilado en la batería de La Isleta, en marzo de 1937. Cincuenta años después, el capital había logrado enyugar de manera menos sangrienta, más refinada. Con frecuencia se recuerda en el discurso económico anticolonialista la diferencia salarial con las nacionalidades ibéricas, que es de 15 puntos negativa para Canarias. Se conoce y habla menos de la diferencia salarial entre los trabajadores del sector privado y los del sector público en las islas, que es de 56 puntos más para estos sobre aquellos. La estadística varía, sin embargo, en ambos casos: para el sector privado, porque un volumen importante de la masa salarial se paga "en negro", no se declara ni registra en la Seguridad Social; para el sector público, porque la mitad de los empleos públicos son temporales, sujetos a precariedad y con una creciente tendencia a la "gestión indirecta", es decir, la prestación de servicios públicos fuera de las condiciones laborales consolidadas del sector público, a través de "organismos autónomos", patronatos, asociaciones o empresas proveedoras de la Administración, y por tanto, en los presupuestos no se contabiliza esta masa salarial en el capítulo de personal, sino en el de transferencias de capital, camuflando costes de trabajo en gastos de actividad para eludir la normativa de déficit público.

El desarrollo administrativo del archipiélago no está en relación con la respuesta pública a las necesidades y demandas básicas. La razón de ello no es económica, sino política. La Sanidad pública no tiene la finalidad de garantizar la salud, sino evitar que la relación entre explotación y salud se manifieste en forma de conflicto y demanda de socialismo e independencia en las islas. La Educación pública no tiene el objetivo de formar una ciudadanía educada, competente y crítica, sino mantener ocupada y entontecida a la juventud y darle una salida laboral no conflictiva para las relaciones sociales y de dominación. Sucesivos planes de empleo sustanciosamente financiados, no tienen la meta de reducir el paro, sino crear una clientela de formación y colocación a través de los fondos para el desempleo, nutriendo a los "agentes sociales" para garantizar la "paz social". Todos estos sistemas públicos, junto a una red administrativa hipertrofiada y sobredimensionada -Canarias es el territorio con más administraciones por metro cuadrado de la Unión Europea, y aún hay quien quiere segregar más municipios- compuesta por la Comunidad Autónoma, los ayuntamientos, los Cabildos y las universidades, y los servicios y funcionarios estatales, conforman en el archipiélago una masa de empleados que constituyen el grueso de la clase media, formada directamente por unas 200.000 personas, el 25 por ciento de la población activa empleada, y otras tantas indirectamente a través de contratos, subvenciones o licitaciones.

Situaciones parecidas pueden observarse en Galicia, Cantabria, Extremadura o Andalucía, con unas estructuras productivas poco industrializadas donde el peso del sector agrario es significativo. Sin embargo, en Canarias la pregunta es ¿cómo se ha podido alcanzar en los últimos treinta o cuarenta años un nivel de desarrollo del sector público y mejoras de las condiciones de vida y actividad económica equiparables a las de los territorios continentales industrializados, si somos una colonia prácticamente improductiva? En el ancho mundo de la desgracia no es usual que, en condiciones de explotación colonial o semicolonial, un pueblo dependiente sea bendecido por el capitalismo metropolitano gracias a una mera "evolución de los indicadores". No hay una explicación económica para esto. Si nuestro pequeño país de las maravillas es una fantasía, ¿cómo pudo sobreponerse al país de verdad, oprimido, explotado y colonizado?

El independentismo de los setenta y primeros ochenta, para la burguesía y la terratenencia isleñas, fue un maná en su relación con el Estado. Esa relación se había estructurado durante el franquismo, a través del régimen orgánico de la dictadura. La representación por sectores de actividad estaba concentrada y articulada en torno a los nombres de algunas de las antiguas familias terratenientes que habían participado activamente en las Sociedades Agrarias y las instituciones donde se escribieron y acordaron las listas de fusilados y desaparecidos de la guerra civil y se tomaron todas las decisiones, de común acuerdo con los militares y policías golpistas, para la instauración del régimen fascista. Con ellos había algunos técnicos, profesionales liberales de la abogacía y el comercio, que los asesoraban constantemente en la transformación y capitalización de sus propiedades en rentas y nuevos negocios. Por último, la clase dominante estaba formada por agentes del imperialismo, representantes y gestores de las industrias y concesionarios de capital español y extranjero. Cuando llegó el momento de la Transición, con el antecedente de la "revolución de los Claveles" de Portugal y los efectos de la crisis del petróleo, esa burguesía terrateniente e imperialista acudió al Estado para expresar su temor a la revolución y la independencia, exigiendo como antaño acciones represivas, diplomáticas y, lo más importante, importantes inversiones públicas y más concesiones administrativas y fiscales.

Nuestra clase media debe su crecimiento y expansión, en modo cierto, al MPAIAC y a la lucha obrera independentista de la Transición (CCT, SOC, PCU, etc.), que condujo al Estado y la clase dominante local a ponerse de acuerdo para reforzar las prácticas caciquiles en el empleo público con el fin de aplacar políticamente esa "deriva" y cercenar su engrosamiento por las y los trabajadores descontentos. Por eso tenemos unas administraciones que crecen continuamente aunque no funcionan o funcionan a "medio gas" en la provisión de los servicios que tienen encomendados: crecen con la demanda pero en realidad no responden a ella, muchos puestos y servicios son meros simulacros de servicio, artificios para mantener "enchufada" a la gente, porque su finalidad principal no es surtir las necesidades para las que estos empleos fueron concebidos originalmente, sino sostener en la media y por encima de la media las condiciones de vida de una parte de la clase trabajadora, a pesar del subdesarrollo productivo, inhibido por inconveniente, mientras el colonialismo y el capitalismo privado explotan el territorio y a la mayoría del pueblo ante su indiferencia; y a la vez, convertir a esta cohorte medioclasista en el horizonte vital de estos explotados para la mejora de sus condiciones de vida, frente a cualquier ruptura fundamental o tentativa de cambio estructural, de socialismo e independencia.

Al final, en los ochenta, alguien podía replicar cómo es que queríamos la independencia "si todo viene de España". Y en efecto, todo venía ahora de España en cantidades crecientes, pero no era por el éxito de nuestra dependencia, sino porque los trabajadores canarios habían querido la independencia y el socialismo y eso movilizó todos los recursos del Estado en las islas para impedirlo. El resultado de ello está a la vista, no sólo fue el reflujo histórico del movimiento comunista internacional o el extendido aquietamiento revolucionario del marxismo y la derrota estratégica del MPAIAC y el independentismo "interior", sino que en el contexto colonial canario el adocenamiento de cientos, miles de militantes, estuvo determinado, en última instancia, también, por cambios sustanciales en las condiciones de su vida material, respecto a generaciones anteriores, cambios cuyo origen político hay que rastrear en las medidas contrarrestantes de tipo económico y administrativo adoptadas contra el movimiento socialista, tanto revolucionario como reformista, de descolonización.


*Capítulo extraído del artículo publicado en Canarias-Semanal.com por Octavio Hernández: "Acerca de caciquismo y cuestión agraria en Tenerife, acotaciones y vivencias".

Medio centenar de personas protestan contra la financiación pública de la Feria de Abril

El domingo 19 de abril en la ceremonia de clausura de la II Feria de Abril de Las Palmas de Gran Canaria, alrededor de medio centenar de ciudadanos se concentraron para mostrar su rechazo a la financiación de la Feria de Abril por el Ayuntamiento capitalino. Los asistentes, muchos de ellos ataviados con trajes tradicionales canarios y banderas nacionales, acudieron convocados a través de Internet, y con el apoyo de organizaciones políticas, entre ellas los jóvenes independentistas de Azarug. La concentración portó una pancarta con el lema “En defensa de la cultura canaria” firmada por el colectivo Azarug y se repartieron cientos de panfletos explicando la postura de los manifestantes. Al contrario de las pretensiones del PSOE capitalino, muchos andaluces comprendieron y mostraron su apoyo a los ciudadanos permitiendo incluso que subiera uno al escenario a exponer los motivos de la protesta. La financiación por parte del Consistorio capitalino de una Feria de Abril sevillana de tres días de duración con 19 ventorrillos en un contexto de grave crisis económica, donde peligran empresas públicas como Guaguas Municipales, es una auténtica burla a los ciudadanos de la capital. Máxime cuando la cultura canaria en la ciudad se encuentra en un estado de absoluto abandono, ya sea la tradicional como la moderna. Por otro lado, una casposa imitación de la auténtica Feria de Abril andaluza no resulta comprensible para muchos andaluces que viven en nuestro país, que tampoco entienden que las instituciones canarias se desentiendan de las propias tradiciones culturales del Archipiélago. La respuesta por parte de algunos organizadores para justificar el despilfarro econónomico se redujo a repetir insistentemente que ellos eran “muy canariones” y que “Potenciar la Feria de Abril también era apoyar a la cultura canaria que es multicultural y cosmopolita”. La despedida fue bajo la desafiante advertencia de proseguir financiando con los impuestos de los ciudadanos las III Feria de Abril de Las Palmas de Gran Canaria en el 2010.




Fuente: Canariaslibre.com

13/4/09

El “miedo al moro” no será jamás un argumento



El señor Juan Jesús Ayala, presidente insular del PNC en Tenerife y Director General de Administración Territorial y Gobernación del Gobierno de Canarias, en su reciente artículo Cuidado: El Magreb se desestabiliza”, nos deja perplejos. Este señor alerta a los canarios de la desestabilización del norte del Continente, concretamente en Marruecos, donde la crisis puede llevar a una mayor conflictividad social y por tanto a una tendencia ultranacionalista marroquí que afecte a Canarias. Sin embargo, este individuo que se considera a sí mismo como “nacionalista”, no duda en utilizar el viejo y manido recurso del “miedo al moro”, sobado recurso utilizado por el reino Borbón y sus defensores en Canarias para justificar la “necesaria” dependencia de España. De la misma España que vendió el Sáhara Occidental a Marruecos, la misma España que con su ocupación legitima la ocupación de gran parte de nuestro espacio marítimo canario por Marruecos. Pero es que lo más lamentable es cuando no se duda en tergiversar los hechos desde la desinformación y la total ausencia de contraste. Sólo así se explica que el señor Ayala caiga en tales patinazos como escribir erróneamente el nombre del partido marroquí que, según él, “reivindica Canarias”. El Partido Istiqlal (no Istikial, señor Ayala), es ciertamente el mayoritario en el Gobierno marroquí, y su ideología conservadora, arabista y monárquica sigue insistiendo en su reivindicación del “Gran Marruecos”. Este “Gran Marruecos” incluye los territorios del Sahara Occidental, Ceuta y Melilla, así como las Plazas de soberanía españolas adyacentes (el Peñón Vélez de La Gomera, la Isla Perejil, las Islas Chafarinas y el Peñón de Alhucemas). Sin embargo, es falso que el Istiqlal o Marruecos reivindique "Canarias insistentemente”, es más, portavoces del Gobierno Marroquí han afirmado en reiteradas ocasiones que en ningún momento Marruecos ha reclamado ni reclamará las Islas: "Le aseguro que Marruecos nunca ha tenido ni nunca tendrá una reivindicación sobre Canarias y ningún marroquí ni representante de instituciones estatales ni comerciales ni ningún ciudadano de a pie se le ha pasado alguna vez por la imaginación reivindicar Canarias" afirmó hace unos meses el cónsul marroquí en Canarias.


Este tema del “miedo al moro” ya lo hemos tratado en este espacio en algunas ocasiones, ya que somos conscientes de que abordar un análisis de la realidad de este país y su entorno desde el prejuicio y la ignorancia constituye una auténtica irresponsabilidad. Además no se nos escapa el hecho de que en algunos sectores del soberanismo isleño anide el “miedo al moro” basado en prejuicios y la desinformación total de la realidad marroquí y norteafricana en general. Nos permitimos recomendarle al señor Ayala, que en la improbable posibilidad de que usted no esté alineado con los intereses del Estado español a la hora de tratar este tema, se informe de la realidad del estado vecino y aprenda a contrastar la información. Que conste que en ningún caso, como ya hemos aclarado, nos hemos posicionado en favor de los intereses del reino Alauita, así como tampoco del reino Borbón, -tan hermanos que son-, sino de los genuinos intereses de nuestro país: Canarias. ¿Usted y CC-PNC pueden decir lo mismo?.


Blog Nación Canaria


Artículos relacionados:


http://nacioncanaria.blogspot.com/2008/12/el-bulo-de-la-invasin-marroqu.html

Españoles de las Islas difunden en la red su xenofobia con los canarios

ORGULLO GODO. CANARIAS ES ESPAÑA. Así se denomina un grupo en la red social de Facebook que manifiestan su odio contra todo lo que huela a canariedad y cuestione la españolidad de las Islas. Su creador Agustín Muñoz Grandes, muestra en su perfil de usuario la imagen de un miembro de la División Azul española que lucharon junto a los nazis en la II Guerra Mundial. En su presentación asegura que "por ser godo está discriminado en Canarias, en la seguridad social y en el mundo laboral y en todo". Además insta a todos los canarios que "no estén a gusto , Coge la patera y vete pa Marruecos, guanche!!" A pesar de los intentos de ocultar por los medios de comunicación la reconocida xenofobia y racismo por parte de muchos españoles en las Islas, la extensión del uso de internet deja al descubierto de la opinión publica más facilmente estas tendencias siempre presentes entre muchos "peninsulares" residentes en nuestro país. Por supuesto no han faltado canarios españolistas y ultraderechistas dispuesto a unirse en la "cruzada contra el guanche" y por la "españolidad de Canarias". Siglos hemos emigrado los canarios hacia Cuba y Venezuela a causa del colonialismo hispano, ¿ahora quieren que emigremos a Marruecos?.

9/4/09

El Habla Canaria

La página Jablantin (http://www.jablantin.blogspot.com/) nos anima a escribir un artículo sobre el español de Canarias. El Habla Canaria constituye sin duda una de las principales señas de identidad de nuestra nación. Forjada durante siglos es fruto de nuestra historia, y conocer sus peculiaridades y características es el primer paso para ser conscientes de su valor. Garantizar su regeneración y su futuro pasa por su dignificación como dialecto del español ni mejor ni peor que otros, pero sí nuestro.
Jablantín. El canario o Habla Canaria es un dialecto o modalidad lingüística de la lengua castellana o español en nuestro país. Es uno de los dialectos que conforman la lengua castellana estrechamente vinculado a las hablas castellanas del Caribe, y es uno de los geolectos del castellano en África junto al castellano del Sahara y el de Guinea Ecuatorial.
Orígenes
La antigua lengua hablada en el Archipiélago Canario era el bereber (Tamazight), pero tras la conquista de las Islas por parte de la Corona de Castilla en 1496 se impuso la lengua castellana. El bereber fue cayendo en desuso durante el siglo XVI hasta su desaparición de las Islas en el siglo siguiente, dejando una profunda impronta en la toponimia y en el emergente dialecto canario. La mayoría de los colonos europeos fueron andaluces y portugueses, de ahí la gran influencia de sus hablas en la conformación del dialecto canario. El idioma portugués fue hablado en algunas regiones del Archipiélago donde hubo mayor presencia de colonos lusos, fundiéndose con el español. Durante siglos el español de Canarias se desarrolló muy ligado al área del mar Caribe, influyendo decisivamente en el español de Cuba, Puerto Rico, República Dominicana y Venezuela. En el estado de Luisiana (Estados Unidos) se instaló una colonia de isleños hace siglos que siguen manteniendo el dialecto canario como lengua vernácula. Dentro de la lengua castellana el dialecto canario tiene una profunda personalidad propia, más vinculada al castellano suramericano que al peninsular español. Además cuenta con un rico léxico propio de sus específicas influencias bereberes (guanchismos), portuguesas, americanas e inglesas.

Gramática y Fonética

-Pretérito indefinido. Como en la mayoría de variantes del español americano, se utiliza generalmente el pretérito indefinido en lugar del pretérito perfecto compuesto. Ejemplo:"Hoy visité a Jonay" en vez de "hoy he visitado a Jonay".
-Ustedes. Como en el español de América, los canarios utilizan este pronombre para la 2ª persona del plural. Así, en lugar de decir vosotros estáis dicen ustedes están. Hay excepciones en algunas zonas de las islas más occidentales, e incluso arcaísmos en La Palma como “ustedes vos vais” o “vaivos”.
-Combinando con los indefinidos nada, nadie y nunca, el cuantificador más suele aparecer en posición inicial de sintagma (más nada, más nunca, más nadie).
-Diminutivo. Existe un uso importante del diminutivo -ito. Ejemplo: Vamos a hacer una comidita. En La Palma se llega a usar un grado más de diminutivo en casos particulares como chiquititito, y se usa también ahorita como diminutivo de ahora.
-Diminutivo acortado. En algunos diminutivos, se suprime silabas, como es el caso con la mayoría de las variantes del español americano. Ejemplo: Cochito en vez de cochecito, florita en vez de florecita. Abunda los diminutivos de “illo” o “ito”, los nombres personales de personas mayores acabados en “ito” son una fórmula de respeto y cariño, y el “illo” a los más jóvenes (“pollillo”) como forma cariñosa.
-Seseo. Consiste en pronunciar los sonidos de "c" y "z" de manera igual, ejemplo: la palabra "Cecilia" suena igual que "Sesilia".
-Pronunciación especial de la "s". La "s" se pronuncia como "h" aspirada al final de cada palabra o ante consonante: "Lah mohcah" en vez de "las moscas".-Tendencia a la silaba abierta: “Flo” y no “flor”, “paré” y no “pared”, “atual” y no “actual”, “fatá” y no “fatal”…
-Cierre de las vocales “e” y “o” en el final de las palabras: “niñu” en vez de “niño”, “costumbre” en vez de “costumbre”.-Pérdida de la “d” en posición intervocálica: “lah paréh” en vez de “las paredes”.
-Pronunciación de la "ch". La pronunciación de la "ch" es distinta a la pronunciación en el resto de hispanohablantes, puesto que es sonora en lugar de sorda. Los hablantes españoles la perciben como una "y"; aunque no llega a ser una "y" del todo. Esta pronunciación también se halla en el Caribe.

-Pronunciación de la "h". En lugar de la “j” por ejemplo “naranha” por “naranja”. También conserva en unas pocas palabras la aspiración de la "f" inicial latina igual quelas hablas extremeñas, andaluzas y muchas hablas americanas. La pronunciación de la "h" aspirada, asemejándose a una "j". Por ejemplo: "jediondo" en vez de "hediondo", "jinojo" en vez de "hinojo" o "jarto" en vez de "harto". También sustituye a la “r” cuando va seguida de “n” o “l” por ejemplo se dice “cahne” en lugar de “carne”, “Cahloh” en vez de “Carlos”.

-Unión de la "s" final con la vocal siguiente. "lo'sojoh", los ojos. (Nótese que también es común la separación, dicho como lo'hojoh)

-Diferentes formas de pronunciar palabras, ejemplo: "enderechar", en vez de "enderezar".

-Desaparición del "de" en determinadas expresiones. Ejemplo: "Casa Marta" (o Ca`Marta), "gofio millo", "carne cochino", "finca plátanos", etc. También es muy común en otras hablas castellanas.
Léxico

Arcaísmos: como “Indispués” por “después”, “Ansina” por “así”, “besos” por “labios”, “dir” por “ir”…
-Berberismos o “guanchismos”: Se trata de una serie de términos de que sobrevivieron de la antigua lengua hablada en las Islas hasta su caída en desuso en el siglo XVI y XVII. Suelen estar vinculados al mundo de la flora y fauna (“Tabaiba”, “perenquén”, “guirre”…), a oficios como la ganadería (“jaira”, por “determinado tipo de cabra” “baifo” por “cabrito”, ”guanil”, “cabra salvaje”, “teberite”, “marca en la oreja del ganado” “goro”…), así como a actividades o productos vinculados a la cultura indígena (“gofio”, “mencey”, “tagoror”). Además, toponimia de origen bereber salpica toda la geografía isleña (“Canarias”, “Tenerife”, “Haría”, “Hermigua”, “Tindaya”, “Tijarafe”, “Taibique”…) así como nombres propios (Gara, Jonay, Zebenzuí, Yaiza).

Portuguesismos: El portugués es el idioma que más voces ha proporcionado al español de Canarias, debido a la gran proporción de lusos entre los colonos europeos, así como de los indígenas que regresaron de Madeira. Se trata de una gran cantidad de palabras de todas las categorías gramaticales y vinculadas a la mayor parte de las esferas de la vida, aunque especialmente a la agricultura ("millo" por maíz), la ganadería (términos como "bosta", excremento del ganado), el mar y la pesca (como "margullar", nadar bajo el agua o "burgao" pequeño caracol de mar) y el ámbito del hogar (palabras como "gaveta", cajón, o "fonil", embudo).
-Americanismos: Son numerosas debido al fuerte vínculo con América: “papa” por “patata”, “guagua” por “autobús”, “fotingo” por “coche destartalado”.

-Procedencia inglesa: Se trata seguramente de las voces más recientemente incorporadas desde otros idiomas al habla canaria, resultado de los vínculos comerciales con Inglaterra y el establecimiento de negociantes británicos en las islas, sobre todo en los siglos XIX y XX. Del Inglés proceden términos como "queque" (dulce elaborado al horno a base de huevos, azúcar, pasas y otros ingredientes, del inglés cake), "quinegua" (tipo de papa, del inglés King Edward) o "naife" (nombre del cuchillo canario típico usado en el cultivo del plátano, proviene de la palabra inglesa knife).

-Arabismos: Del contacto con la costa africana continental ha llegado a Canarias un reducido número de arabismos, relacionados con el mundo del camello ("majalulo", cría del camello) o “jaique” (traje descuidado y un traje tradicional de Gran Canaria también conocido como “camisuela”) y otras introducidas por los pescadores canarios del banco pesquero canario-sahariano y por los emigrantes retornados desde el Sahara Occidental.

Procedencia francesa: Del francés hablado por los primeros conquistadores normandosse ha conservado un reducido número de palabras, con un valor más bien testimonial. Ejemplos de ello son los términos "malpaís" (terreno improductivo, en Canarias usado para designar a los campos de lava, parece proceder del francés antiguo "male país") o "cardón" (tipo de planta autóctona, que podría proceder del francés "chardon", planta con espinas).

Crítica

Blog Nación Canaria. Es necesario abordar la manipulación de este elemento identitario tan importante de la canariedad por los talibanes de la españolidad de las Islas. Para algunos autores y filólogos de esta corriente, tan bien situada en las esferas institucionales, el hecho de que la lengua hablada hoy en las Islas sea el español evidencia “el carácter total y radicalmente hispano de la sociedad canaria”, e incluso bendicen a los isleños como “legítimos continuadores de la civilización latina”. En el total delirio rojigualdo, justifican su extremismo hispanista denominando al pueblo canario como “pueblo hispano-canario” y reiterando la extinción indígena para justificar, inclusive racialmente, la hispanidad. Este fenómeno no es exclusivo de Canarias. También existe en Suramérica, donde aún perviven corrientes ideológicas estrechamente vinculadas a la herencia colonial española. Estos sectores siguen insistiendo en la exclusión del elemento indígena de sus entidades nacionales. Otro ejemplo puede ser Andalucía, donde se continua marginando los elementos árabes y moriscos de la conformación de la identidad andaluza. La idea de raíz parte de un españolismo recalcitrante que minimiza todo elemento no "latino-civilizador" de sus identidades, en vez de integrar y dignificar su herencia autóctona o distinta a la hispana, se margina. En resumen, se construye una identidad falseada a imagen y semejanza de la tradicional hegeminía ligada a la dominación del reino Borbón. El hecho de que los isleños hablemos castellano no nos asimila y convierte en una sociedad “total y radicalmente” hispana, Acaso, por ejemplo ¿los caboverdianos son una sociedad total y radicalmente lusa?. Para nosotros el castellano es un idioma internacional,- es de los más hablados del mundo- y un gran instrumento de comunicación con numerosos pueblos, sobre todo de la hermana América. Además contamos con una adaptación y una variedad del español con personalidad propia dentro de la lengua, algo que debemos defender. Pero eso no es motivo para construir, -mejor dicho, seguir construyendo- una identidad canaria basada en la exclusión de los otros elementos que la han conformado, y mucho menos pisando nuestra machacada raíz ancestral, continuando una tradición de marginación y asimilación, impulsada desde el poder, que dura siglos. El racismo no sólo se reduce a lo racial, sino que se extiende a los ámbitos étnicos y culturales.
Situación actual

Jablantin. Tardíamente aparecen las primeras obras que recopilan léxico canario en el siglo XIX. Tenemos obras importantes como los Cuentos famosos de Pepe Monagas del conocido Pancho Guerra, que recopiló en sus obras, a mediados del siglo XX, el habla popular de las cumbres grancanarias, hoy en progresiva desaparición. Por dicho motivo, su obra ha sido durante mucho tiempo despreciada. Afortunadamente, el dialecto canario es de las variedades del español más estudiadas, cuenta con numerosos estudios dialectales como los de Manuel Alvar entre otros. La terciarización de la economía canaria, la irrupción de los medios de comunicación de masas, la alfabetización de la población, y la masiva llegada de españoles a partir de mediados del siglo XX, aceleró el retroceso del habla canaria que ya estaba decayendo desde comienzos del siglo XX. La casi total marginación del sistema educativo y de los medios de comunicación, ha extendido entre la población una idea de desprestigio en torno al habla canaria relacionándola con la incultura y la las clases bajas. Numerosas palabras han caído en desuso, otras están en franco retroceso sustituidas por palabras castellanas, sobre todo en las generaciones más jóvenes. A pesar de los esfuerzos en su dignificación de unos pocos, la proliferación de medios de comunicación locales y nacionales canarios, un reducido porcentaje de contenidos canarios en el sistema educativo, se sigue excluyendo el uso del habla canaria o reduciendo a ámbitos folklóricos, festivos y humorísticos. En programas televisivos se ridiculiza abiertamente el habla canaria, mientras se intenta imitar el habla castellana en los programas informativos y más serios. El futuro del habla canaria es incierto, ya que avanza hacia una asimilación casi total al habla castellana española, sobre todo en las áreas urbanas. La solución pasa en primer lugar por cambiar la idea que se tiene generalizada del habla canaria, que no es ninguna manera peor ni mejor que hablar español de España, sino diferente, como lo es el argentino o el cubano, y actuar en consecuencia mediante la dignificación en todos los ámbitos. El habla canaria es un tesoro lingüístico único en el mundo. Lo hemos heredados de nuestros abuelos y nuestra historia como pueblo.

6/4/09

Canarias para Ruben Blades


Tema inédito dedicado a nuestro país por parte del artista y ministro de turismo del país centroamericano: Panamá. El tema no fue editado, pero apareció en la BSO de la película "Distrito 34" de Nick Nolte. Subido por Kestrel89
Letra:

Mira que bonito que brilla el sol en Islas Canarias,
es como un abrazo iluminando al que llega allí.
Es como el Caribe no se parece en nada España.
Los de Tenerife y los de Las Palmas es como aquí.
Cuando se escucha hablar a un canario, se reconoce la voz de un paisano.
Tienen la chispa y la picardía que tenemos los americanos.

Mira que bonitas son las muchachas de Islas Canarias,
tienen un carácter de fuego y dulce para el amor.
Mira que rumberos son los muchachos de Islas Canarias,
al fin de semana tocan campanas, conga y bongó.

En Canarias tremendo tumbao
Vaya a Rommel Fernández
En Canarias tremendo tumbao
y a la gente que está allá
En Canarias tremendo tumbao
A Tenerife y La Palma
En Canarias tremendo tumbao
Un abrazo de Rubén y Panamá
-------------------------------
En Canarias tremendo tumbao
Ay que bien bien nos trataron
En Canarias tremendo tumbao
Cuando visitamos allá
En Canarias tremendo tumbao
Esa gente son hermanos
En Canarias tremendo tumbao
Gente buena de verdad

3/4/09

"Defendamos a Canarias"


Cancion de Braulio "Canto a Canarias" personalizada por la orquesta Canaria de musica salsa "Golosina". La version donde homenajea a todos los isleños repartidos por America. En especial Cuba y Venezuela. Subido por adaysantanachinea

RESEÑA: "Desarrollo y subdesarrollo de la economía canaria"



“Desarrollo y subdesarrollo de la economía canaria” es un título casi mítico en los estudios económicos del Archipiélago. Los autores son los economistas Antonio González Viéitez y Oscar Bergasa Perdomo. Ambos con un amplio curriculum profesional. Oscar Bergasa Perdomo es profesor titular de Economía en la ULPGC, fue consejero de la Comunidad Autónoma de Canarias y diputado en el Congreso español. Antonio González Viéitez por su parte, es profesor de economía en la ULPGC y miembro de la Academia Canaria de la Lengua. Fue consejero de política territorial de Gobierno de Canarias y diputado en el Parlamento de Canarias por Coalición Canaria. Podríamos considerar a Antonio González Vieitez uno de los ideólogos de la antigua ICAN y posteriormente de Coalición Canaria. Sobre los autores es evidente recalcar que no son independentistas, pero esto no le quita valor a la obra en sí, ni a la notable formación académica de los autores.


Es un trabajo básico para introducirnos en la historia de la economía canaria de estos últimos cinco siglos y conocer sus profundas debilidades y características más acusadas. A pesar de haber sido redactada en pleno régimen franquista, cuya primera edición se remonta a 1969, supone una obra pionera en las islas en el campo del análisis social crítico. La obra se inscribe en la ruptura cultural e ideológica con el páramo intelectual del franquismo. Las soluciones propuestas se esperaban imponer bajo un sistema democrático y une status de autonomía del Archipiélago, sin embargo no fue así. Y es que aunque podemos decir que el sistema democrático formal y la autonomía se han consolidado, también lo es que el turismo masivo se impuso como nuevo monocultivo económico, y con él, el incremento de la dependencia exterior. La dependencia económica y política de Canarias hace inútil cualquier intención de consolidar una economía sólida y equilibrada.La economía canaria es frágil y dependiente. Y que desechada la independencia económica (la autarquía) la estrategia de cualquier política económica sensata ha de ser transformar la dependencia en interdependencia y la fragilidad en solidez”.


El libro consta de 9 capítulos, y en la edición de 1995 tiene notas para su actualización. Comienza con una introducción histórica a la economía isleña haciendo hincapié en los orígenes de la distribución de la propiedad, tierras y aguas. También en las franquicias y las distintas etapas de la economía nacional desde el siglo XV. “Una de las principales características de la economía canaria fue su irregularidad”. Posteriormente indaga en los factores económicos del país, la infraestructura de la “región” canaria, demografía y los altos índices de analfabetismo tradicional en nuestro Archipiélago. La Agricultura y su bicultivo tradicional así como las necesarias transformaciones y planificación de la producción. El pírrico sector industrial y sus problemas, el espectacular desarrollo del sector servicios, el sector exterior y las instituciones. En el último capítulo se exponen las conclusiones y propuestas que son de especial interés para reflexionar sobre el pasado y futuro económico del Archipiélago. La obra concluye con una “Petición de principios”, mediante planes de desarrollo y de gestión, que propone un cambio político frente al franquismo del momento. La transformación agrícola es otra necesidad; “La reforma de la propiedad de la tierra, la insularización del agua, la planificación y ordenación de nuestras tierras de cultivo y de nuestras producciones y la mejora radical de nuestras redes de comercialización y distribución”. También se alerta de lo que sería la masiva depredación del territorio por un desarrollo urbano totalmente desordenado; “La transformación de la agricultura canaria y la distribución óptima de sus recursos, según zonas, cortaría el peligroso proceso de macrocefalía (Urbana) que se ha generado últimamente en el región” (…)” La macrocefalía, que además de impedir el desarrollo de un marco social auténtico a la escala del hombre, produce serios estrangulamientos económicos de todo tipo. (…) “A largo plazo se vuelve contra las auténticas necesidades de la colectividad y que a corto plazo acelera la propensión hacia la concentración demográfica y productiva, confirmándose con ello un patrón de distribución poblacional que será difícilmente reversible en el futuro”. Es fundamental contar con un sistema agrario amplio y dinámico y además indagar en sus posibilidades de industrialización. En esta profundización hacia a la industrialización se puede empezar por el sector pesquero con enormes posibilidades (en la actualidad sin acceso al banco pesquero canario-sahariano esta propuesta no es posible). En lo que respecta al sector servicios se recuerda que “el pueblo canario no ha protagonizado en ninguna forma dicho proceso, simplemente se ha plegado a él, intentando obtener los mejores resultados, cada cual desde sus perspectivas particulares y de su condición de clase”. No sólo se puede depender del turismo. Para nosotros un aspecto también fundamental es lo que los autores denominan “Regeneración moral” de la sociedad canaria y que hace referencia a una inversión cualitativa en la preparación del canario (educación e investigación) y al cambio político (autonomía y democracia). “Es necesario atender a la enseñanza y a su nivel de cultura, raciocinio y comprensión. (…) La enseñanza es la inversión más rentable que desde el punto de vista de la sociedad pueden hacer los habitantes de estas islas para hacerlas realemente afortunadas. (…) La investigación la vemos encauzada a transformar las condiciones naturales concretas que rodean, limitan y condicionan el progreso de las Islas”.


Desarrollo y subdesarrollo de la economía canaria no es una obra independentista. Los autores aunque defienden la diversificación y económica el desarrollo sostenible, lo hace dentro de parámetros dependentistas y capitalistas. Sin embargo en la reedición de 1995 en sus notas de actualización reconoce que la Autonomía y la democracia no han sido suficientes en muchos aspectos, aunque haya habido mejoras de importancia. Y es que la inexistencia de una soberanía, de un estado propio, nos imposibilita establecer nuestros propios parámetros de desarrollo económico en función a nuestros intereses económicos como pueblo. La historia económica de Canarias, nuestros intereses económicos siempre tan diferentes a los de España (Hecho diferencial), están ahí para recordárnoslo. Las idealizadas franquicias, las especificidades fiscales, las instituciones locales y autonómicas…son simples parches al caro coste de la españolidad de Canarias.


Blog Nación Canaria

1/4/09

Raíces; El derecho a conocer nuestra identidad

Es posible que para muchos canarios el término amazigh les suene completamente extraño. Otros estudiantes de lengua inglesa lo relacionarán con el vocablo anglosajón que traducimos como "asombroso". A algún iluminado le sonará a "algo guanche"... Por fortuna cada vez son más los que conocen el significado de esta voz y no sólo desde el punto de vista semántico, sino de la trascendencia que ella tiene para nuestras historia e identidad.

Para seguir leyendo: