Los nacionalistas canarios a diferencia de los peninsulares no dudan de su españolidad. |
En
resumen valoraremos la estrategia que hemos desarrollado en diferentes frentes
coordinados para garantizar nuestro dominio futuro sobre las Canarias. Los
siglos venideros en un mundo rápidamente cambiante no nos permitirán volver a
cometer nuestros viejos errores coloniales que pueden no sólo separar Canarias
de España, sino constituir un precedente indeseable para Cataluña y País Vasco.
Frente
Político
Nuestra
estructura electoral e institucional nos permite garantizar la hegemonía de los
partidos que controlamos. El insularismo
es un valor que necesitamos impulsar y explotar como antídoto para el
canarismo. Mientras el canario piense sólo en su isla y mire con recelo a la
isla vecina no se detendrá a pensar en los intereses del archipiélago en su
conjunto, y eso, evidentemente favorece nuestros intereses. Fomentando algunas
desigualdades consolidaremos un sistema donde las islas competirán entre sí en
nuestro beneficio. El ancestral ‘Divide y vencerás’. Ahí entra de
lleno el papel de los partidos ‘nacionalistas’ que aún así denominados nos son
fieles y sirven como catalizador de cualquier tentación nacionalista.
El insularismo es el mejor antídoto contra el nacionalismo y nuestro ministro lo sabe. |
En
Canarias hemos conseguido lo inimaginable en otras regiones españolas; dar un
nuevo significado al término nacionalista no existiendo contradicción con la
españolidad. El nacionalismo que controlamos es tan fiel a la españolidad que
ni siquiera habla de nación canaria, en todo caso de la única real: la
española. En el ámbito del radicalismo extraparlamentario tenemos el control
garantizando. La división entre los partidos más radicales de corte
nacionalista e independentista lo tenemos bien sembrado, aunque poco tienen que
hacer nuestros colaboradores. Estos mismos grupúsculos se caracterizan por la
chapucería e ineficacia, el sectarismo ideológico, el personalismo. De hecho mi
impresión es que para muchos de ellos es una manera de entretenimiento, hechos
que además nos tranquilizan y hacen que ningún hombre de negocios canario se
plantee siquiera apoyarles económicamente. Mientras se entretengan en la vía
electoral estarán ocupados en un campo controlado por nosotros y no molestarán,
lo demás es labor policial.
Frente
Económico
Aquí debemos tener especial cuidado para
controlar las élites económicas de Canarias, mediante subvenciones y
permisividad con la corrupción que mantendrá entre ellos la fragilidad y
desentendimiento de cualquier iniciativa canaria que vaya más allá de sus
bolsillos particulares. En segundo lugar mantener bajo nuestro estricto control
puertos y aeropuertos y sectores estratégicos. Desmantelar cualquier sector
productivo (agrícola, industrial…) en base a subvenciones y el REA frente a la
producción local. Los resultados ya los estamos apreciando desde hace décadas,
lo que nos ha garantizado un importante mercado cautivo que nos aporta riquezas
a nuestras empresas y producción peninsular. Con la participación de empresas
multinacionales en el turismo y el mercado nos garantizamos que otros terceros
países se involucren en el apoyo de nuestra soberanía sobre las islas. Por
último el sector energético fundamental para el control de las islas.
Con la urbanización de los terrenos más fértiles nos garantizaremos una mayor dependencia de las Islas en el futuro. |
Aunque
las potencialidades energéticas de Canarias son inmensas hay que impedirlas a
toda costa. No sólo tienen petróleo en sus aguas y posiblemente gas, sino que
además cuentan con una potencialidad importantísima en energías renovables. El
desarrollo de cualquiera de estos sectores en las Islas haría peligrar nuestro
predominio económico y por tanto político, además de perjudicar a nuestras
empresas energéticas y sus intereses. Por si fuera poco podría llamar el
interés de otras potencias extranjeras que podrían apoyar en este sentido. Por
no hablar del riesgo de que los canarios profundicen en la consecución de un
sistema financiero propio, algo que por suerte ya hemos casi desmantelado no existiendo
bancos canarios en la actualidad salvo algún resquicio testimonial. Finalmente,
ecologismos baratos de lado, España necesita la bolsa de petróleo la para salir
de la crisis actual y es una riqueza que nos pertenece. Mientras mantendremos
nuestra bolsa del Mediterráneo intacta para tiempos futuros.
Frente
educativo
Es un frente clave para la asimilación
del canario a la españolidad, pero afortunadamente tenemos el control total.
Aquí evitaremos que el canario caiga en las redes del pensamiento separatista
dándole a conocer su españolidad y que Canarias es meramente una parte
integrante de nuestra gran familia española. Aprenderá además nuestros valores
culturales y políticos. Aunque las comunidades autónomas tienen un 30% de
margen para contenidos propios hemos conseguido que en Canarias esta política
no se desarrolle. Los canarios no han sido capaces de implantar escuelas
propias ni mucho menos un sistema educativo público que fuerce los contenidos
canarios en los centros. Así los escasos maestros canarios que se empeñan en la
vía de los contenidos canarios se ven desamparados.
Autor: Godofredo Matamoros