6/6/13

Cinismo español ante el homenaje a Antonio Cubillo

Lo cierto es que Cubillo no fue ningún terrorista. No lo decimos nosotros, sino que lo reconoce el mismísimo Estado Español, y es por este motivo que nunca pudo ser juzgado como tal.


Redacción. La prensa de masas en Canarias se ha visto salpicada estos días por una lamentable polémica impulsada por el españolismo en Canarias. El motivo es el homenaje a la figura histórica de Antonio Cubillo en Santa Cruz de Tenerife propuesto por Coalición Canaria y respaldada por Sí Se Puede-IU y Ciudadanos por Santa Cruz. Una vez más, como cuandotuvo lugar el estreno del documental histórico ‘Cubillo, crimen deestado’, el españolismo y sus mas media vuelven a criminalizar al canarismo enarbolando el fantasma del supuesto ‘terrorismo’ independentista. La Policía Nacional española, el Partido Popular y el PSOE hacen frente común ante un icono de la historia de Canarias muy, pero que muy molesto. Precisamente porque su vida es un ejemplo de la brutalidad  terrorista del Estado Español heredero del Estado franquista. 

Veamos los sesudos argumentos de la derecha hispana en Canarias. La desconocida Asociación Canaria de Víctimas del Terrorismo, dependiente de la española Federación de Asociaciones Autonómicas de Víctimas del Terrorismo, se pronunció al respecto en los siguientes términos; "Es una indecencia, una falta de rigor histórico y un despropósito que un ayuntamiento como el de Santa Cruz homenajee a un terrorista como Cubillo" y agregó: "El Consistorio tiene que saber que este homenaje causa mucho dolor y sufrimiento a las familias canarias víctimas de esta barbarie". Por otro lado, la Confederación Española de Policía (CEP) amenaza incluso con denuncias por ‘enaltecimiento del terrorismo’.
Sin embargo, cabe recordar que CC no propuso el homenaje en base a su militancia y activismo en el Movimiento Para la Autodeterminación e Independencia del Archipiélago Canario (MPAIAC) sino en su labor como abogado laboralista en defensa de los trabajadores canarios, su faceta como escritor y profesor de español en el extranjero, y en definitiva, como una figura esencial en la historia de nuestro país. Con todo, la derecha española no acepta el reconocimiento público a Antonio Cubillo ya que según ACAVITE "Lo que pretenden con esto es maquillar este enaltecimiento al terrorismo con eufemismos y justificaciones románticas del independentismo armado que no convencen a nadie."

Contradicciones y falta de respeto del españolismo
Cubillo tras su paso por la Audiencia Nacional en Madrid. En ningún
 momento se le pudo juzgar por terrorismo y fue puesto en libertad. 
Es curioso, como las organizaciones españolas ignoren cuestiones fundamentales sobre la militancia antifascista, anticolonialista e independentista de AntonioCubillo al frente del MPAIAC. Hablan de 'terrorismo' cuando las acciones armadas del MPAIAC fueron en el contexto y en contra de una criminal dictadura fascista. Una dictadura que se mantenía en base a un régimen de terror, que practicaba sin pudor el terrorismo de estado. Detenciones y juicios sin ninguna garantía democrática, torturas, asesinatos, ejecuciones etc. Estatus político en el cual resultaba legítimo cualquier tipo de resistencia, aunque sea armada.
"Las acciones del MPAIAC fueron en el contexto y en contra de una criminal dictadura fascista. Una dictadura que se mantenía en base a un régimen de terror, que practicaba sin pudor el terrorismo de estado." 
Hablan de lo ‘terrorista’ que era el MPAIAC, pero olvidan que las acciones de dicho movimiento fueron dirigidas a la destrucción de infraestructuras con una motivación meramente propagandística, y que, en ningún caso, tuvieron la intención de atentar a la vida humana. En cambio, las acciones del Estado franquista en Canarias están salpicadas de sangre de inocentes asesinados a sangre fría. Inolvidables mártires de la libertad de nuestro pueblo  como Javier Fernández Quesada, Bartolomé García, o Antonio González Ramos son exponentes máximos de esta barbarie. Si bien el MPAIAC causó accidentalmente víctimas, pero víctimas al fin y al cabo, nuestra posturas no es el olvido. Nuestra postura es que se reconozcan todas las víctimas, no sólo las de un bando o nacionalidad. Pero que prevalezca, ante todo, la verdad y el respeto a los que lo dieron todo y renunciaron a todo por nuestra libertad como pueblo frente a la tiranía.
Javier Fernández Quesada, Bartolomé García y Antonio González Ramos. Jóvenes
canarios asesinados salvajemente por el terrorismo fascista español.
Por todo ello nos preguntamos ¿quiénes fueron los que realmente sembraron el horror y la desgracia en las familias canarias? ¿Acaso la Asociación Canaria de Víctimas del Terrorismo representa y acepta a las familias de Javier Fernández Quesada, Bartolomé García, Santiago Marrero o Antonio González Ramos como víctimas del terrorismo? ¿Acaso no causa dolor a las familias canarias víctimas del terrorismo de Estado  los continuos homenajes al ejército español, a la policía española y la multitud de monumentos y nombres de calles dedicadas al fascismo español en las ciudades y pueblos canarios?
¿Acaso no causa dolor a las familias víctimas del terrorismo de Estado  los continuos homenajes al ejército español y la multitud de monumentos y nombres de calles dedicadas al fascismo español?"
La verdad les duele, y lo que fastidia no es el sufrimiento de las accidentales víctimas del MPAIAC, sino que el homenaje sea a un independentista y antifascista. Un personaje fundamental de la historia de Canarias que recuerda las vergüenzas terroristas del Estado Español en la llamada transición. Lo cierto es que Cubillo no fue ningún terrorista. No lo decimos nosotros, sino que lo reconoce el mismísimo Estado Español, y es por este motivo que nunca pudo ser juzgado como tal. Antonio Cubillo, con sus luces y sombras, con nuestros acuerdos y desacuerdos, no hay duda de que fue ante todo un canario que entregó su vida a la lucha por la libertad de Canarias en todos los sentidos. Víctima del terrorismo español y precursor de la toma de conciencia nacional y social del pueblo canario, de la revitalización de la cultura canaria y otros valores de libertad que el fascismo franquista aplastó durante cuatro largas décadas.