21/9/13

Racismo hacia los canarios en el mundo laboral



A. Ramírez. Canarias-Semanal. La noticia saltaba a las redes sociales a comienzos de esta misma semana generando la comprensible indignación de los internautas isleños.
     
La empresa de telefonía Lofetel - con sede en Salamanca - ha publicado una oferta de empleo para "comerciales en Las Palmas", incluyendo un sorprendente requisito para quienes pretendan acceder a estos empleos. "Ser de la península y estar dispuesto a desplazar la residencia a Las Palmas". Por si el veto impuesto a los trabajadores canarios no hubiera quedado suficientemente claro, la oferta específica "abstenerse expresamente quien no cumpla este único requisito".
     
Un caso de flagrante e ilegal discriminación laboral hacia los  autóctonos que -según denuncian algunos trabajadores afectados - no carece de precedentes en el Archipiélago Canario. La cadena de supermercados  Lidl ha sido igualmente señalada por expresar  abiertamente en sus ofertas de empleo el mismo "requisito". La discriminación practicada en este caso por  Lofetel, sin embargo, se ve agravada por el hecho de que la empresa que no admite empleados canarios ha creado una filiar insular  para poder acogerse a los generosos beneficios fiscales, en términos de ahorro de impuestos, que ello supone. 

Dado que no todas las compañías cometen el error de marketing de reconocer abiertamente su política de contratación segregadora resulta imposible precisar hasta qué punto ésta podría estar extendida entre las numerosas multinacionales instaladas en las Islas, que disfrutan de los privilegios que se les conceden al incorporarse a la Zona Especial Canaria. Un instrumento económico enmarcado en el Régimen Económico y Fiscal de Canarias (REF), cuya supuesta finalidad es "promover el desarrollo económico y social del Archipiélago a través de la diversificación de su estructura productiva".