26/4/11
25/4/11
Memoria de los canarios que emigraron a Uruguay en el siglo XVIII
“Mis cuatro abuelos eran de Tenerife, vinieron en el mismo barco, mantuvieron los vínculos después y nació el amorío entre mis padres”, recuerda Antonino Cabana, con 2 hijos, 5 nietos y 3 bisnietos, sobre sus antepasados. A su juicio, “esa gente ayudó a construir e hizo grande a Uruguay, la suiza de América, porque eran tenaces en el campo y trajeron el concepto de familia. Es un ejemplo de esfuerzo y dedicación que no se puede olvidar. Mi abuelo vino de Arona a Solís y se sentía rico con un pedazo de tierra”. De hecho, su relato Un puñado de tierra, dedicado a la memoria de su padre, narra: “Desde las Islas Canarias llegaba una cultura agraria desconocida pero básicamente necesaria para alimentar, sostener y afincar al criollo mestizado que se iba haciendo sedentario al impulso de las familias. Esa inmigración no venía por oro, diamantes ni petróleo, eran amantes del suelo, disciplinados cultores de sus ancestros, cuyos códigos de la moralidad, el trabajo y los sacrificios se transmitían celosamente a las nuevas generaciones”. Y asiente Daniel Santos Moreira, también nacido en el departamento de Lavalleja y sentado a la misma mesa de la Asociación Islas Canarias de Maldonado, pues no olvida los orígenes rurales de su familia en el interior del país, pese a residir ahora en la ciudad litoral de San Carlos. De 82 años y retirado, Santos Moreira comparte con Cabana Estevez la afición por la literatura y, por ello, aprovechó sus múltiples viajes como representante comercial para “pintar con palabras”, prosa y poesía sobre “cualquier cosa que motive para escribir y cantar”. Fundador de una parranda canaria, suele acompañar su voz grave con una guitarra, laúd o bandurria para recitar, por ejemplo, unos versos en honor de su antepasado procedente de Lanzarote y pionero en la elaboración de gofio en Uruguay mediante la fuerza del agua: “Desde las Islas Canarias/ llegó un día mi bisabuelo/ buscando una nueva patria/ con una ilusión y un sueño./ Las aguas del Mataojo/ cual retrospectivo espejo/ reflejaron las nostalgias/ de aquel hombre molinero./ Y así comenzó una historia/ y una industria fue creciendo/ se transformaron en chacras/ grandes campos ganaderos”. Además de la tradición del gofio, Daniel Santos recuerda de su infancia otras costumbres isleñas trasladadas hasta el país charrúa como la lucha canaria o el juego del palo: “Era muy común mientras se asaba el cordero durante la esquila, un momento de fiesta y de ayuda entre el vecindario”. Precisamente, la presidenta de la Asociación Islas Canarias de Maldonado, Ivonne Montañés, lamenta que no se concretara el proyecto del Gobierno autónomo de impulsar una liga escolar de lucha. Por ello, desde la entidad, con 250 socios y un decenio de actividades, tratan de “difundir la historia y cultura canaria” para evitar su olvido con la convicción de que “el ser humano no puede renegar de su sangre”, aunque “cuesta integrar a los jóvenes”. En este contexto, Rubén García Perdomo, de 72 años y ancestros tinerfeños, rememora la tradición de elaborar el pan en casa y reservar un pedazo de masa madre como regalo para los novios después del matrimonio: “Las suegras la llevaban a la casa de la nueva pareja como símbolo de unión de dos familias canarias, porque los canarios se solían casar entre canarios”. Ya jubilado de la actividad inmobiliaria, García Perdomo prepara con “mucha emoción” un viaje a Tenerife para el próximo julio para asistir al nacimiento de su quinto nieto, pues uno de sus tres hijos emigró a España y “cayó de casualidad en Los Cristianos”. Emigración de ida y vuelta, otro guiño de la Historia.
20/4/11
La opresión de un pueblo no árabe :los amazighes del Norte de África.
Hareb Khelifa. El viento revolucionario que se extendió por el país en el norte de África y el Oriente Medio ha despertado el interés por la izquierda en esta región. Los términos "árabe", "árabes" o incluso "revolución árabe", de uso común, tienen el defecto de estar basada en el origen étnico. Sin embargo, en aquellos países cuyo idioma dominante es el árabe, varios pueblos minoritarios han sufrido la opresión de las dictaduras en el mismo lugar. Los levantamientos de las masas y el derrocamiento de los gobiernos marcan el final de un ciclo político iniciado por el nacionalismo árabe en la década de 1950. Para consolidar su poder, este nacionalismo burgués se basa en la imposición de una lengua (el árabe clásico) y la religión (el Islam), en detrimento de la emancipación de las clases trabajadoras y, especialmente, los costes los pueblos no árabes como los amazighes. Aunque el árabe es la lengua mayoritaria en los países del norte de África, el hecho de que millones de bereberes, como yo, sigan hablando su lengua amazigh (tamazight) cada vez más en retroceso, resistimos con dificultades a su desaparición programada. La lucha por el reconocimiento de la cultura bereber en Argelia y África del Norte es esencial. Esta cultura es oprimida por una ideología oficial, patrocinada por los regímenes dictatoriales que han optado después de las independencias por la política de arabización de los pueblos indígenas (la mayoría bereber), para quienes el árabe era originalmente una lengua extranjera. Debemos tener en cuenta que el proceso de arabización comenzó en esta región desde hace siglos. Se ha acentuado después de la independencia, ya que arabización fue impuesta por los dictadores nacionalistas panarabistas y los estalinistas, bajo el disfraz de una descolonización cultural y lingüística. Este bloque árabe, o también llamado "mundo árabe" es un invento de Nasser en Egipto, Assad en Siria, Gaddafi en Libia, Boumedienne en Argelia. El mundo árabe es una maquinaria política neocolonial prefabricada que sólo perpetúa nuestra alienación, nuestra sumisión.
Hoy que estos regímenes son desacreditados y expulsados por sus pueblos, la renovación democrática requiere romper con las políticas y las ideologías de estos regímenes. De lo contrario, toda esta herencia repetirá los mismos errores cometidos en el pasado (la represión, la intimidación, la sumisión, la alienación, la injusticia). Por lo tanto seguir asimilando al pueblo bereber en este bloque y presentarlas bajo la denominación de "árabe" es persistir en un orden, en un pensamiento desfasado. Incluso dentro de la lengua árabe, se hace una distinción adecuada entre dialecto árabe ( el argelino, el Marroquí ) y el árabe clásico literario. Si el primero es el idioma efectivamente utilizado por la mayoría de las poblaciones de Argelia y Marruecos, que se deriva su existencia de su misma utilización, el segundo caso se impone a las personas en la escuela, en los medios de comunicación y el discurso oficial de los gobernantes. La política oficial en Argelia particularmente ha hecho del árabe dialectal y del amazigh (hombre, la cultura y el idioma) objetos depreciados, desvalorizados, híbridos y arcaicos, para promover en contrapartida el árabe clásico, la lengua pura y sagrada (la del Corán). Esta promoción se lleva a cabo con el fin de encajar en el bloque árabe-islámico ideológico transnacional (la Umma Al Arabiya), donde el árabe y el Islam son los únicos elementos que definen la identidad de todos los países que se extiende desde el Medio Oriente hasta el Atlántico, aunque se traiciona la realidad local y nacional.
[Chicas ataviadas con el traje tradicional cabilio reclamando "Tamazight tutlayt tunsibt", es decir, la oficialidad de la lengua amazigh en Argelia]
Así, hoy, hablar en lengua árabe no significa que uno sea árabe o agente al servicio del poder establecido, es como aquellos argelinos que hablaban perfectamente francés (durante la colonización) y que, a pesar de su perfecto dominio de esta lengua, siempre fueron considerados como “los nativos”, “musulmanes”, “árabes”, “africanos del norte”,... pero nunca como franceses. Los habitantes del norte de África no son exclusivamente árabes. Continuar diciendo esto es persistir en la negación de la identidad y pasar por alto sectores enteros de la historia de esta región. Como Kateb que habló en francés a los franceses para decirles que no era francés, hablo, escribo en árabe para decir a los árabes que no soy árabe.
En 1949, el programa del PPA (Partido del Pueblo Argelino, independentista), que no mantenía en su definición de la identidad argelina los elementos árabes y musulmanes, provocó una crisis sin precedentes en los anales de la historia argelina. De hecho, los militantes bereberes-marxistas, rechazaron una definición étnica y religiosa de la futura Argelia rechazando tal restricción de la identidad nacional, reuniéndose alrededor de la idea de Argelia argelina, que tendrá en cuenta el conjunto de la identidad argelina en sus diversas dimensiones y componentes. La respuesta del órgano dirigente del PPA es rotunda. Tachados de berberistas, de agente a sueldo de la Francia colonial, estos militantes son excluidos y otros asesinados. En 1963, un año después de la independencia, estalló una rebelión. Es dirigida por el Frente de Fuerzas Socialistas, un partido de izquierda que rechazó la dictadura y la apropiación del poder por parte de un grupo de jefes de guerra autoproclamados. Entre las causas de los conflictos, nos encontramos con la negación de la identidad, que se caracteriza por el rechazo de la lengua y la cultura amazigh y la toma del poder por los líderes de la independencia de Argelia, por el cual la Cabilia (región de habla bereber) ha pagado un alto precio. La guerra fraticida que estalló se saldó con la muerte de más de 400 cabilios (amazighes), todos antiguos combatientes del FLN (Frente de Liberación Nacional) contra el ejército colonial. En 1980, la falta de libertades (individuales y colectivas) y la brutal represión ejercida por el poder establecido provoca el descontento popular. Después de la prohibición de una conferencia sobre la antigua poesía amazigh antigua, toda la Cabilia se subleva. La respuesta, que comienza en la Universidad de Tizi Ouzou, la protagonizan miles de estudiantes y afecta a toda la Cabilia y Argel, sacudiendo seriamente al poder y el dogma del pensamiento único. ¡Es la Primavera Amazigh!. Una vez más, la afirmación de la identidad y el idioma es la piedra angular del movimiento de protesta. La represión, una vez más, es atroz, con cientos de heridos y torturados, decenas de estudiantes y militantes amazighistas encarcelados, la mayoría de los cuales pertenece al movimiento de izquierda denominado GCR (Grupo Comunista Revolucionario, el PST después de la apertura democrática en 1988). Ellos son acusados por supuesto de regionalistas, de ateos, de elementos a sueldo de las potencias extranjeras… Por otra parte, los ateos, los elementos a sueldo de potencias extranjeras...
La resistencia continúa
Traducción. Blog Nación Canaria. Fuente: Kabyle.com
La tasa de paro juvenil canario la más altas del Estado español
Con la mayor precariedad y un futuro poco halagüeño
Los jóvenes canarios constituyen solamente, junto a de las mujeres, el colectivo más afectado por el desempleo. Son, igualmente, los más afectados por la creciente precariedad que caracteriza al mercado laboral español. Otro dato confirmado por el responsable de la comisión especializada Socioeconómica del CJE, José Luis López, quien ha alertado sobre la extensión de los contratos temporales entre los jóvenes que logran obtener un trabajo y entre las mujeres, donde estos contratos a tiempo parcial llegan al 24% del total registrado. Las maneras en la que la picaresca empresarial -favorecida por la regulación "flexibilizadora" y ultraliberal impuesta por el Gobierno español con el apoyo del sindicalismo amarillo y español (CCOO, UGT) se manifiesta, son múltiples. Según José Luis López es frecuente la utilización por parte de las empresas de los contratos para becarios, que se utilizan de forma encubierta para encadenar contratos precarios de jóvenes empleados. De esta forma - denuncia López - "nos podemos encontrar con becarios de 35 años sin ninguna experiencia laboral reconocida, que por tanto tendrán muchas dificultades para ingresar en el mercado laboral. La edad de entrada en el mercado laboral, en efecto, está aumentando por los efectos de la Crisis. Un hecho que, unido al aumento de los años de cotización requeridos para cobrar una pensión de jubilación podría estar gestando las bases de un empobrecimiento masivo y mayor de la población canaria.
Denuncian el empeño de NC y PSOE en urbanizar la vega agrícola de Gáldar
17/4/11
Las mitificaciones republicanas españoleras y el independentismo de izquierdas canario
14/4/11
La planificación territorial en Canarias favorece la corrupción´
FuenteLaProvincia. Varona participará en el III Congreso de Derecho Urbanístico que se celebrará estos días en el Auditorio de La Oliva (Fuerteventura). Para Varona, "hay un poder político y unos planificadores omnímodos que con sus lápices y cambiando las rayas del planeamiento de un sitio a otro pueden generar o destruir millones de euros en plusvalías, esto supone una tentación muy grande y lo normal es que el que tiene la tentación acabe delinquiendo". Canarias es una de las comunidades del Estado español con mayor tasa de delitos de corrupción asociados al urbanismo y el Código Penal actual no favorece que se castiguen las infracciones como se debiera. El magistrado Varona echa de menos un mayor incremento de las penas para los que cometen delitos de cohecho o prevaricación porque, pese a las reformas que se han realizado del Código Penal, "realmente la figura de los delitos contra la ordenación del territorio y urbanísticos ha experimentado una sola reforma en el Código de 1995 y se contemplan penas de inhabilitación o multas pero las de prisión son escasas". Javier Varona afirma que la superposición de leyes y planes entorpece la ordenación territorial de las Islas. Recuerda que el texto refundido del año 2000 de las leyes de Ordenación del Territorio y de Espacios Naturales de Canarias es "complejo, engorroso y prolijo", lo que la convierte en una de las leyes más complicadas que existen.
"Entre menos leyes y más cortas mejor", advierte Varona, lo contrario de lo que sucede en Canarias, donde "las leyes son malas y se han multiplicado desde que se redactaron las primeras normas sobre el territorio en los años 80". En los últimos 30 años "las leyes se han sucediendo una tras otra y todas han sido malas y han provocado lo contrario de lo que se pretendía", advierte el juez de lo contencioso. Tampoco la moratoria turística ha solucionado las cosas, más bien al contrario. Varona recuerda que la víspera de su aprobación por el Parlamento los ayuntamientos aprobaron cientos de licencias para construir camas turísticas. Además, la ley de Directrices es una norma "cómoda" que emplaza la ordenación territorial a la redacción de planes y que, 10 años después, se ha incumplido.
13/4/11
La ilusión de cambiar Canarias
8/4/11
El independentismo canario: entre la abstención y el voto
Este debate, que tuvo en los primeros tiempo cierta importancia, unos que se oponían a legitimar las elecciones impuestas por la metrópolis, para hacer extensivo el derecho común español en esta colonia, y otros que como decimos, mostraron su disposición a concurrir a las mismas y que lo siguen haciendo, con la creencia firme y la falsa posibilidad, que las ideas y los mensajes del independentismo en un contexto totalmente adverso, pudieran llegar o llegaran a concienciar a amplios o a todos los sectores de la sociedad canaria, de la imperiosa necesidad de la libertad de nuestra Patria en un contexto, que al igual que hoy o quizás hoy aún peor, escasamente proclive, después de más de 500 años de colonialismo, a emprender la vía de la liberación nacional, teniendo en cuenta que la emisión de tales mensajes solamente sólo cuenta con 15 días de propaganda cada cuatro años, encima restringida, cuando no boicoteada, por los diferentes medios de comunicación.
Éramos consciente que si bien Pueblo Canario Unido en su programa electoral recogía el reconocimiento de la Soberanía para el Pueblo Canario, la formación de un Gobierno Provisional Canario que convocase una Asamblea Constituyente, así como sus competencias, etc., Unión del Pueblo Canario en su programa, aquellas propuestas fueron bastantes diluidas, por el conglomerado de sectores diverso que los componía, y en su programa sólo incluía el Derecho de Autodeterminación, relegado al punto 14 de su programa electoral. No obstante ello, el triunfo conseguido siendo histórico, las diferentes corriente ideológicas insertas en el mismo y la feroz campaña desplegada por todos los medios de comunicación españoles en esta colonia, dieron al traste con aquel proyecto, marcando un antes y un después en la historia de las elecciones en estas tierras coloniales.
Efectuado el referéndum, los resultados del mismo, en las dos provincias canarias fueron los que se detallan a continuación:
La abstención como resultado del mismo fue en la provincia de Las Palmas de un 30,05% (126.307 personas) y en la de la provincia de Santa Cruz de Tenerife de un 40,49% (200.146 personas), teniendo que destacar un 10% más de abstención en la provincia de Santa Cruz de Tenerife, dando un promedio para toda Canarias de un 35,27%. El triunfo de la corriente pro española es constatable, aunque no es menos cierto que las condiciones políticas del momento, después de 36 años de la dictadura franquista, no eran las propicias, por intervenir diversos factores políticos que condicionaron la opinión pública canaria, sujeta al igual que ahora, a las informaciones y dirigencias de los españoles.
La historia del Frente Abstencionista Canario quedó circunscrita a aquel momento histórico, pues desapareció Pueblo Canario Unido, parte de cuyos dirigentes formaron parte de Unión del Pueblo Canario y otros denunciaron el carácter reformista de esta formación, el Partido Socialista de Canarias cuya cabeza más visible fue Manuel Bermejo, partido que después de una batalla legal por su denominación con el Psoe, paulatinamente desaparecería del escenario político, el Sindicato Obrero Canario sufriría una escisión y el Partido de Unificación Comunista se uniría al Mirac, y también seguiría el camino de su desaparición o disolución.
En el año 1986 se fundaría el Frepic Awañak que se vería sujeto a la dicotomía entre Participación/Abstención y se vería envuelto en tensiones propiciadas por un sector de la militancia, mayormente en Gran Canaria, que formaba parte de la Plataforma Unitaria Anticolonial (PUA), creada formalmente el 15 de abril de 1989, que proclamaba que su espacio no era el electoral y por lo tanto se oponía a las mismas, aduciendo que para concurrir a las elecciones habría que contar con dos factores primordiales: El humano y el económico, aparte veían que las instituciones no eran instrumentos validos de transformación de la realidad colonial, así como el concurrir a las elecciones llevarían a un fracaso y el desánimo de la militancia y de su espacio electoral.
Por aquellos años y hasta principio de los 90 la PUA jugó un papel importante, por su activismo, en la concienciación de amplios sectores populares con temas como la oposición a las centrales eléctricas de carbón que se intentaban instalar en el sur de Gran Canaria o como su campaña de rechazo a la integración de Canarias en la Comunidad Europea, de la forma en que la burguesía colonial estaba proponiendo, que dejaba desguarnecida a las producciones interiores, creando una Coordinadora Pro-Referéndum C.E.E., a la que España, ni la burguesía colonial canaria, estaba dispuestos a realizar, dada la experiencia con el NO a la OTAN de Canarias del 12 de marzo de 1986. Al no realizar España el Referéndum, la Plataforma Unitaria Anticolonial continuó con su campaña, promoviendo el no votar a las elecciones europeas del 15 de junio de 1989.
El Frepic Awañac por su parte, y a pesar de la sangría que supuso el abandono de una parte importante de su militancia por sus planteamientos de un abstencionismo anticolonial, concurrieron a las elecciones de 1987, 1991 y 1996, con unos resultados, previsibles, que fueron un fracaso. Por otra parte hay que decir que también cuando se presentaron a las elecciones el CNC , Siete Estrellas Verdes, etc. no han contado con el favor del electorado, debido mayormente a que sus propuestas son acalladas por todos los medios, para evitar que las mismas llegasen a los ciudadanos canarios.
El abstencionismo canario desde 1977 al 2004 se ha cifrado en una media del 32,73%, por encima de la española de un 6,7%, porcentaje que se ha atribuido a causas meramente políticas, en contra de lo que sustenta algunos analistas, de que se trata de una abstención pasiva, motivada, o bien de que el canario elige la playa o que pasa simplemente de los partidos políticos y de sus llamadas a la participación.
Diversos análisis que se han realizado sobre la abstención en nuestra tierra, se ha estimado que la abstención anticolonial oscila entre un 7 y un 10%, es decir una horquilla de abstencionistas anticolonial, a la baja, de entre 90 a 100.000 votantes, lo que coincidiría con lo que se refleja en las encuestas de sociobarómetro, en los que unos 180.000 solo se consideran canarios sobre la población canaria, por otra parte no deja de ser curioso el que nunca se haya hecho un análisis sobre las causas del abstencionismo en Canarias.
Hay que tener en cuenta que el llamado Parlamento de Canarias o más bien Parlamento Colonial de Canarias, blindó en dos ocasiones su estructura funcional, una subiendo los topes electorales mediante la Ley Orgánica 4/1996 de 30 de diciembre del 3 al 6% a nivel regional y del 20 al 30% a nivel insular, conculcando el pluralismo político y con la excusa de que el Parlamento corría el riesgo de ser ingobernable, y cuando el 18 de abril de 1990 rechazó por amplia mayoría el Derecho de Autodeterminación, para cerrar el paso a propuestas de esta índole.
Teniendo en cuenta la situación de emergencia social y económica en la que se encuentra Canarias, con un sistema político agotado, y comoquiera que se van a presentar dos o tres partidos independentistas por separados, motivo aún mayor para abstenerse.
El Estado Español y sus sirvientes en esta colonia, siempre buscarán por todos los medios que el ciudadano vote, así demostrará que el sistema funciona y que la democracia existe, de ahí que la mayoría de los partidos políticos que participan en los procesos electorales en esta colonia son intermediarios válidos y los que se autocalifican como independentistas, avalan con su participación la españolidad de Canarias legitimando las mismas, y los que proponemos una abstención activa y anticolonial, no hemos estado dispuesto, y no seguimos estando, a entregar Nuestro Propio Poder, a unos partidos que han demostrado su incapacidad para que Canarias cuente con unas estructuras propias, políticas y jurídicas en un país independiente.
4/4/11
La raigambre canaria de Uruguay de actualidad
“Un doblón a cada persona más los instrumentos de labor”
Miles de historias similares protagonizaron emigrantes canarios, en su mayoría procedentes de Fuerteventura y Lanzarote, en Uruguay a lo largo de diversas oleadas hasta mediados del siglo pasado. Todos ellos continuaron la ruta marcada por los primeros colonos isleños a inicios del XVIII. El proceso fundacional de Montevideo arrancó, según apunta Néstor Hormiga, en 1724 “para frenar el avance portugués” sobre la orilla oriental del Río de la Plata. Por entonces y tras mandato del rey Felipe V, el gobernador de Buenos Aires, el vizcaíno Bruno Mauricio de Zabala, instaló un campamento militar sobre los terrenos de la actual capital uruguaya, aunque todavía faltaban pobladores para transformar de precario en permanente el asentamiento con el objetivo de fundar una ciudad. Por ello, el monarca español envió cartas a los gobernadores de Galicia y Canarias para disponer el reclutamiento de colonos, aunque tan sólo se ejecutó la orden en las islas gracias a la experiencia previa del marqués de Vallehermoso en expediciones similares con rumbo al Caribe.
Tras los edictos difundidos en Santa Cruz de Tenerife, La Orotava y Tacoronte “para que las familias que voluntariamente quisieran pasar a dicho puerto de Buenos Aires para la población de los sitios de Montevideo y Maldonado comparezcan sin dilación ante su merced para alistarse y aprontarse, advirtiendo se le dará un doblón a cada persona por un vez y más los instrumentos de labor que necesiten”, el buque Nuestra Señora de la Encina, apodado La Bretaña y dotado con 24 cañones, partió del puerto chicharrero en agosto de 1726 con 20 familias a bordo para una travesía de 90 días. La “facilidad” para enrolar en la aventura a un centenar de personas “indica que existía en los habitantes de las islas una determinada intención emigratoria”, estima Luis Enrique Azarola Gil en el libro Los orígenes de Montevideo 1607-1749 (La Facultad, 1933), antes de atribuir tal predisposición a la pertenencia de los colonos a “la clase más desamparada o baja en su país de su origen” y a las “noticias de las escalas de los buques en Canarias, con crónicas verbales que adquieren relieves de leyenda”.
Finalmente, un total de 13 familias canarias, a las que se sumaron otras 6 de Buenos Aires, desembarcaron en la bahía de Montevideo el 19 de diciembre de 1726, aunque Azarola Gil sitúa la fecha de fundación jurídica de la ciudad en 1729 después de una segunda colonización isleña mediante el arribo de otras 130 personas a bordo del navío San Martín. A partir de ahí, todo resultó más sencillo, en opinión del historiador uruguayo, para poblar el nuevo territorio: “Convengamos en que las ventajas del avecindamiento eran más promisorias gracias a las doncellas que llegan del lejano archipiélago y que ofrecían el aliciente de su juventud, sus labores, sus virtudes domésticas y su piel blanca. (…) De ahí que la presencia de las guapas muchachas isleñas estimulase el celo, antes reacio, de poblar el paraje. Con ellas empezó en Montevideo toda una tradición de amable hospitalidad y fueran ellas las que dieron a la tierra semidesierta y bárbara un primer rayo de gracia y belleza moral”.
Canelones, la isla canaria 'perdida'
Canelones es una región de Uruguay que hunde sus raíces en Canarias. Fueron varias familias procedentes de las islas las que se encargaron de colonizar y modernizar esta región desde mediados del siglo XVIII. Canelones lleva el nombre de Comuna Canaria, ya que fue una zona colonizada por los canarios. La investigación ha sacado a la luz hasta los nombres de los emigrantes canarios que viajaron en los buques fletados desde Lanzarote y Fuertenventura en 1809. Huían del habitual hambre buscando un futuro al otro lado del océano. Los habitantes de la intendencia, que comprende unos 30 pueblos, se llaman a sí mismos 'canarios' y los apellidos de la mayoría confirman un origen en las islas canarias. Manuel Hernández también señala que 'ese origen también se conserva en el folclore y la alimentación'. De hecho, en esta región existen más de 70 fábricas que se encargan de realizar gofio.