20/11/12

Mientras aplican la limpieza étnica en Canarias pretender vender 45.000 casas a extranjeros



Si no hay dificultad alguna para aplicar políticas de limpieza étnica contra los poblados marineros de las costas canarias, sino hay voluntad alguna por parte del poder en modificar la ley para erradicar los desahucios de las viviendas de los trabajadores en beneficio del gran capital, sorprende la facilidad para cambiar la ley con el objetivo de vender miles de casas robadas y vacías a extranjeros en todo el Estado. Por supuesto nada de bajar los precios para que sea asequible o derribar cientos de urbanizaciones innecesarias en Canarias y el Estado Español. En el caso de nuestro país se estima que hay 45.000 viviendas vacías y nuevas para vender a extranjeros ya que son totalmente inalcanzables para la población canaria. Una modificación de la Ley de Extranjería permitirá dar libre acceso a cuantos extranjeros quieran comprar nuestra tierra. Si ya Canarias no tenía ninguna barrera frente al Continente Europeo no nos podemos imaginar sin barrera alguna ante el mundo entero. Un país como el nuestro limitado, ecológicamente frágil y ya de por sí superpoblado. 

La dignidad de nuestro pueblo es la esperanza.
El capitalismo colonial le importa un comino arrasar nuestra tierra con tal de seguir manteniendo el ritmo de enriquecimiento. Pronto sólo los canarios ricos y el cacicato tendrán derecho a residir o poseer un solar en este país, mientras cientos de miles de canarios de clase trabajadora nos veremos obligados a emigrar o excluidos del derecho de contar jamás con una propiedad en nuestra patria. El colonialismo y el capitalismo –hechos que conforman el sistema en Canarias- están aplicando una política de limpieza étnica en nuestro país que posiblemente sea el paso último y culminante para la entrega absoluta de nuestra tierra a la colonización de la globalización. No nos creamos especiales por ello, en toda colonia la colonización demográfica no sólo se lleva a cabo con colonos de la nación metropolitana sino con todo aquel de cualquier nacionalidad dispuesto a colonizar un territorio y a actuar como tal. ¿Todavía hay quien duda de la necesidad de un movimiento nacionalista, soberanista real que asuma el anticapitalismo y la antiglobalización como principios fundamentales?